AMANECIDA
El mundo se despereza tras los cristales.
Se ofrece la mañana en su luz desplegada,
una luz que inunda de rubores
los perfiles líquidos donde se refleja
como una niña tímida,
como una dama avergonzada.
Sólo el trino de los pájaros rompe el silencio
en la extensión palpitante que alcanzan los ojos.
Más allá, sobre la cumbre de los montes presentidos,
la vista se detiene y se pregunta
sobre los paisajes ocultos y apartados
que esconden tras su contorno a medias.
El verde se derramará en las colinas,
trenzará árboles frutales con mediterránea querencia
y precipitará la alegría ineludible.
Respiro hondo y olvido los sombríos cauces interiores.
La eternidad me ha sido concedida en un segundo.
(De su libro "Dicha")
Esta noche es el tiempo,
y su caricia ciega
se extiende por los hombros
que, hundidos y confusos,
curvan el peso de la duda.
El tiempo,
el ácido que sangra y devora
pieles erizadas de sol y de belleza,
el que muda simientes en ecos sin destino
al transformar futuros en capas de hojarasca.
Es un ladrón del reposo vestido de eficiencia.
Es un vicio que se anuda a la columna débil.
Y estira anhelos para forjar cansancios
de metas que no existen.
Y trabaja, sin descanso, pieles de hastío
y dibuja comisuras de crueldad sin fecha.
Y vacía las pupilas del asombro primero
y escancia la miseria de saberse presente.
El tiempo.
Tosco, rudo,
que si mirar pudiera
no soportaría su imagen en los gestos.
( De su libro El nervio de la piedra)
http://elcobijodeunadesalmada.blogspot.com
CRONOS
Esta noche es el tiempo,
y su caricia ciega
se extiende por los hombros
que, hundidos y confusos,
curvan el peso de la duda.
El tiempo,
el ácido que sangra y devora
pieles erizadas de sol y de belleza,
el que muda simientes en ecos sin destino
al transformar futuros en capas de hojarasca.
Es un ladrón del reposo vestido de eficiencia.
Es un vicio que se anuda a la columna débil.
Y estira anhelos para forjar cansancios
de metas que no existen.
Y trabaja, sin descanso, pieles de hastío
y dibuja comisuras de crueldad sin fecha.
Y vacía las pupilas del asombro primero
y escancia la miseria de saberse presente.
El tiempo.
Tosco, rudo,
que si mirar pudiera
no soportaría su imagen en los gestos.
( De su libro El nervio de la piedra)
http://elcobijodeunadesalmada.blogspot.com
11 comentarios:
Querido Mateo, qué sorpresa me acabo de llevar.
Gracias. Me dejas emocionada y agradecida, muy agradecida. Voy a ver si meto un párrafo nuevo en la entrada que tengo, amigo, es lo menos que puedo hacer.
Un abrazo grandísimo.
Encantado de que tus versos construyan este blog...Un abrazo, amiga!
Eres tan espiritual y tan dulce, Isabel.
Son dos poemas a cual más exquisito.
Que belleza!
He descubierto dos perlas más en el vasto tesoro de nuestra querida Isabel.
No sólo es una excelente escritora, sino además un valioso ser humano.
Un fuerte abrazo querido Mateo.
Me he llevado un alegría enorme viendo a Isabel aquí. Su poesía está aureolada con una delicada espiritualidad, como ella, también humana y profunda.
Un abrazo, amiga.
Otro para ti, apreciado Mateo, siempre generoso.
Bellas poesías de Isabel, “Amanecida” es cómo ponerle palabras a las sensaciones que me embargan cuando visito las montañas, “Cronos” ¡cuántas veces me ha hecho sentir así y le he visto tan despreciable!, sin embargo no puedo evitar que en ocasiones me guste.
Un abrazo Mateo
Espero,amigas, que Isabel pase a agradeceros vuestras cariñosas palabras. Un abrazo.
Por aquí ando, llena de gratitud ante comentarios tan hermosos.
TECLA, con qué buenos ojos me miras. Eso de dulce, me lo han dicho alguna vez y yo no me veo tan dulce, que a veces amargo como una almendra de esa clase. Al menos, eso creo.
ADRIANA, cómo me alegra que te gusten ambos poemas. Lo que más me llega es lo de ser buena persona, es lo que pretendo y, a veces, creo que consigo, no siempre, que vivir en ocasiones, molesta a otros.
VIRGI, incides en lo de la espiritualidad de los poemas. Es posible, pues en la poesía suelo meterme en los grandes temas del ser humano, esos tan difíciles de responder a lo largo de los siglos, los que no preocupan a todos.
GAIA07, cómo has atinado en tu comentario sobre "Amanecida". Escribí ese poema conforme amanecía, dentro de un coche, pues iba de viaje, y las montañas se sucedían una tras otra abrazando el valle por el que discurría la carretera. Por supuesto, no iba en esos momentos al volante.
En cuanto al tiempo, "Cronos", ando disgustada con él desde los 22 años y no tengo forma de hacer las paces: siempre me disgusta.
Miles de abrazos y besos para las cuatro , así como para el querido Mateo, que ha tenido esta muestra de generosidad con mi poesía.
Bellos poemas.
La profundidad de "Cronos" :Magistral!
"El tiempo
ES UN LADRÓN DEL REPOSO VESTIDO DE EFICIENCIA.
ES UN VICIO QUE SE ANUDA A LA COLUMNA DÉBIL.
Y ESTIRA ANHELOS PARA FORJAR CANSANCIOS
DE METAS QUE NO EXISTEN."
Impecables versos.
Abrazos a los dos.
Abrazos, Carmela. Espero que te conteste Isabel pero, en cualquier caso, gracias en su nombre! Un abrazo.
CARMELA, muchas gracias por tu lectura.
Lo cierto es que ese poema: "Cronos" es uno más de los muchos que he escrito contra el tiempo. Somos seres regidos por lo temporal, lo sé. Muchos lo aceptan de buen grado y yo ando peleándome con el tiempo desde que cumplí los 22 años. Por supuesto, una lucha perdida y desigual: siempre gana él; pero, al menos, pataleo, lo insulto a mi modo.
Un abrazo, Carmela.
Publicar un comentario